El directorio de YPF decidió avanzar con el proceso de racionalización y optimización de recursos de su portfolio de campos maduros para desprenderse de 55 áreas convencionales que no le resultan rentables a la compañía, a la vez que actualizó su evaluación de activos con un deterioro de US$ 1.800 millones, informó al mercado.
La medida forma parte de uno de los ejes centrales de la gestión del presidente y CEO Horacio Marin de focalizar la gestión en su portfolio de Vaca Muerta y las áreas convencionales rentables, lo que implica desprenderse de las áreas muy maduras que opera a pérdida, tema que fue motivo de cruces desde diciembre con los gobernadores de las provincias petroleras.
Desde su llegada a la empresa, Marin mantuvo encuentros de trabajo con los gobernadores de Neuquén, Rolando Figueroa; Chubut, Ignacio Torres; Santa Cruz, Claudio Ávila; y Mendoza, Alfredo Cornejo, y los distintos gremios petroleros a quienes planteó este plan de trabajo que incluía la necesidad de revertir las áreas no rentables que opera la compañía.
Marin encolumnó a sus colaboradores para llevar adelante un plan denominado 4×4, por el cual buscará multiplicar por cuatro el valor de mercado de la empresa en los próximos cuatro años, lo cual permitirá a la petrolera liderar el desarrollo de los hidrocarburos con la perspectiva de alcanzar en conjunto, hacia 2030, US$ 30.000 millones de exportaciones.
En lo que respecta a la desinversión en el convencional, la expectativa en la empresa es lograr definir para el segundo semestre del año una salida «con paz social» en acuerdo con autoridades y sindicatos, y con una búsqueda de soluciones para cada una de las áreas en las distintas provincias pero con la premisa de «no dejar a nadie en la calle».
Tras la reunión de directorio, la compañía informó que avanzará en la aprobación del proyecto de racionalización que busca «optimizar el portafolio del upstream convencional, permitiendo a la empresa continuar desarrollando las áreas convencionales y no convencionales que aportarán mayor rentabilidad a la compañía y sus accionistas por dólar invertido».
Los campos maduros que conforman el grupo de activos constan de un total de 55 áreas, informó la petrolera en su comunicación a la Comisión Nacional de Valores, las que están forman parte de las que venían siendo valuadas en las provincias de Chubut, Santa Cruz, Neuquén y Mendoza.
La estrategia que habían adelantado semanas atrás fuentes de la compañía podrá consistir en la venta total de cada uno de los activos, la asociación con una pyme del sector que permita a YPF dejar de operar el área o la reversión de la concesión a la provincia correspondiente.
El nuevo horizonte de la conducción que encabeza su presidente y CEO, Horacio Marin, es enfocarse en áreas de alta productividad y eficiencia de clase mundial, lo que alimenta el objetivo de duplicar la producción de gas y petróleo no convencionales hacia 2030, es decir hasta 1,2 millones de barriles de crudo diario y los 200 millones de metros cúbicos de gas día.