
El secretario general de SETIA, Rodrigo Cárcamo planteó un escenario de crisis ante el ingreso de productos con los que no se puede competir por la apertura de importaciones. “La situación cada vez es más grave», afirmó.
El secretario general de SETIA, Rodrigo Cárcamo planteó un escenario de crisis ante el ingreso de productos con los que no se puede competir por la apertura de importaciones.
“La situación cada vez es más grave y vemos que no hay ningún tipo de política nacional que ayuda no solamente a las textiles sino a la industria nacional”, dijo el dirigente gremial a Radio Provincia.
Según la fundación PROTEGER, seis de cada diez máquinas están paradas en el país, y en Tierra del Fuego se trabaja al 30% de la capacidad instalada. “Este gobierno no tiene ninguna intención de que la industria nacional sea una de las patas del sostenimiento y el desarrollo. Nuestro sector ha tratado de tomar contacto con autoridades nacionales para revertir esto, porque la competencia se tiene que dar en igualdad de condiciones. Todo lo que entra de afuera, entra con aranceles muy bajos o con ningún arancel, y crea una competencia totalmente desigual, por los impuestos que deben pagar las empresas nacionales”, planteó.
“Hay cierres de fábricas, hay despidos, algunas empresas van a transformarse para ser importadores y no necesitan mucha mano de obra”, advirtió.
“Hablando solamente de Tierra del Fuego, quedaron ocho empresas y las industrias se encuentran trabajando en un 30% de su capacidad productiva. No ha habido movimiento de despidos y continuamos de la misma manera que terminamos el año pasado, con una situación de poca producción y de incertidumbre, porque las producciones se están realizando mes a mes por la caída de las ventas”, manifestó.
“Vemos anuncios, el levantamiento del cepo, pero para el ciudadano de a pie no cambia nada, al contrario, porque uno va al supermercado y ve los precios. Hoy tenemos alrededor de 470 trabajadores en la industria textil, de un total de mil que había un año atrás. La cantidad de empleos bajó al 50% y a nivel nacional se estima una pérdida de entre 50 y 60 mil puestos de trabajo cuando ingrese toda la mercadería de afuera”, adelantó.
El personal despedido en la provincia fue indemnizado como correspondía pero “la única empresa que no cumplió en tiempo y forma fue Textil Río Grande. Están saliendo los primeros requerimientos de la justicia sobre las auditorías contables y todo lo que demanda un juicio laboral”, señaló.
Consultado sobre los insumos, dijo que “están produciendo con lo justo y necesario, si bien no hay restricciones para ingresar materia prima. Al no tener previsión, las empresas están diagramando sus producciones prácticamente mes a mes”.
La caída en ventas “está entre un 28 y un 30% mensual y llevamos 15 meses de caída continua. La mayoría de lo que se produce va a fabricación nacional, porque exportación no hay prácticamente nada. En el caso de Fabrisur, realiza la tela para las camisetas de la selección nacional, Australtex está más abocada a Once y Flores; después tenemos las hilanderías, que trabajan para otras empresas del continente, pero en general se está moviendo muy poco”, detalló.
Consultado sobre la posibilidad de reconvertir la industria, planteó las limitaciones que existen y dijo que lo más probable es que los industriales se terminen convirtiendo en importadores. “Si no hay algún tipo de aliciente a nivel nacional que ayude a poder competir, el industrial no busca otro tipo de variantes, porque su infraestructura está preparada para una cierta producción. Se hace muy difícil hacer una variación para tratar de exportar y poder competir. Es imposible. Hay dos o tres empresas que están acaparando la industria de Tierra de Fuego, uno trata de ver otro nicho, pero es difícil reconvertir al empresario textil. Si no cierra producir, van a importar”, sentenció.
“Hay que sumar que para poder adquirir telas en el extranjero hay que pagar en dólares, y hasta que no está el pago, no se envía el contenedor a plaza. Hay una cadena de pagos que se ha roto, por eso el gobierno hoy tiene que salir a cubrir un montón de dólares de importaciones, y eso nadie lo dice”, concluyó.